En Adinfa sabemos que toda familia que pasa por momentos difíciles se somete a tensiones imposibles de imaginar en un hogar donde no existen trastornos de conducta. Uno de los principales problemas se encuentra en el hecho de que muchos padres y madres no saben cómo actuar. Intentan ayudar a sus hijos a salir de una situación utilizando métodos razonables, que han visto en sus propias familias pero que no funcionan en sus casos.

Laura y Santiago vivieron esta situación con su hijo, quien desde muy pequeño daba síntomas de que algo no iba bien. Hoy te traemos su testimonio real y desgarrador, porque revela la impotencia y la desolación que durante años han vivido estos padres hasta dar con un método que ha ayudado a su hijo y ha devuelto la tranquilidad al hogar.

Desde Adinfa queremos dar las gracias a Santiago y a Laura por compartir su testimonio con otros padres y madres que pueden estar pasando por una situación similar, con el propósito de ayudarles a encontrar el camino que les devuelva una relación sana y normal con sus hijos.

 

Contadnos cómo empezó todo. ¿Cuáles fueron los primeros indicios de que algo no iba bien?

En nuestro caso, teniendo el niño Trastorno del Espectro Alcohólico Fetal (TEAF) desde pequeño, ya veíamos que algo no iba bien: rabietas, trastornos en la alimentación, falta de socialización con sus iguales, roturas de cosas en casa, dificultad para las tareas académicas, etc.

 

¿Cómo actuasteis ante esta situación? ¿Qué ayuda buscasteis?

Lo cierto es que llegó un punto en el que estábamos desbordados. Habíamos aplicado los mismos esquemas educativos que vimos en nuestras familias, pero no funcionaban con nuestro hijo.

Ante este panorama optamos por acudir a diversos especialistas y pasamos por neuróloga, psicóloga, psiquiatra… pero no logramos cambiar la situación.

 

¿Cómo encontrasteis Adinfa y qué ha hecho por vuestro hijo?

Nos lo recomendó la psicóloga que teníamos en ese momento. El niño estaba pasando por la peor época de su vida. Se escapaba de casa y del colegio, consumía tóxicos, mostraba violencia y agresividad en casa, nos robaba dinero, no respetaba las normas del hogar… No encontrábamos más recursos para controlarlo ni para contenerlo. Tenía por entonces 15 años. 

En Adinfa nuestro hijo se ha reconducido. Pasó a un entorno regulado donde se le quería, se le respetaba y se le cuidaba, al tiempo que se inculcaba el respeto a la norma y a vivir en un ambiente estructurado. 

Siendo tratado médica y terapéuticamente en un grupo de iguales ha evolucionado muy favorablemente, aunque sus dificultades por el TEAF le acompañarán de por vida.

 

¿Cómo veis a vuestro hijo ahora y en qué ha cambiado la situación familiar?

El niño está mucho mejor que cuando ingresó en Adinfa. Está contenido, contento y tranquilo. Ha dejado de consumir tóxicos y es consciente del daño que le causaron. Ha adquirido unos hábitos que no tenía antes, fundamentales para la convivencia familiar.  

La convivencia ha mejorado indudablemente, ya no hay violencia ni agresividad. En casa se ha establecido un sistema de normas y horarios claros a los que se le hace un seguimiento exhaustivo.

 

¿Qué le aconsejáis a los padres que padecen el mismo problema?

Que actúen rápido. Que no esperen mucho tiempo usando recursos que no resuelven el problema. Que se dejen asesorar por especialistas con experiencia en trastornos de conducta, para evitar el agotamiento físico y emocional de la familia y el empeoramiento del niño.

 

¿Recomendaríais Adinfa a otras familias que estén en la misma situación en la que os encontrasteis?

Sin duda. Para nosotros ha supuesto una gran ayuda en un momento muy crítico de nuestro hijo. Nos ha servido para sacarlo adelante, cambiando nuestro sistema familiar adecuándolo a las necesidades de nuestro hijo.

 

Una vez más, gracias a Laura y a Santiago por permitirnos compartir este testimonio en nuestro blog. Desde Adinfa os deseamos lo mejor en esta nueva etapa de convivencia familiar.

Y a ti que nos lees, y que quizás te encuentres en una situación parecida a la que han vivido estos padres, te recordamos que en Adinfa estamos comprometidos con mostrar otros casos similares, respetando el anonimato siempre que nos lo pidan, para que seas consciente de que no estás solo o sola. Y, sobre todo, de que existe solución. Consulta la sección de testimonios reales Adinfa.

Somos el primer centro hospitalario especializado en el tratamiento de adolescentes en conflicto de Andalucía, con todo un equipo de médicos, psicólogos y educadores para ayudarte. Descubre qué hacemos y cómo trabajamos o contáctanos directamente desde aquí.