El fracaso escolar en adolescentes es un problema que preocupa año tras año a miles de familias en nuestro país. La caída en el rendimiento escolar en muchos casos es algo continuado, pero en otros puede ser debido a determinados cambios familiares o personales en la vida del joven.

Entendemos por fracaso escolar en adolescentes las dificultades que estos experimentan para alcanzar los objetivos marcados por el sistema educativo. Pero dichas dificultades también se refieren a la falta de capacidad de adaptación del sistema. En España, el 20 % de los jóvenes ha abandonado prematuramente el sistema educativo sin haber terminado sus estudios de secundaria. Se trata de una cifra preocupante con muchas ramificaciones, entre ellas los posteriores problemas de adaptación al mercado laboral, que influyen en nuestras altísimas cifras de desempleo juvenil.

En el ámbito de la psicopedagogía, el estudio del fracaso escolar en adolescentes debe conducir siempre a un esmerado diagnóstico, y este a un adecuado programa de intervención, teniendo en cuenta la índole general del problema en relación a las múltiples variables que pueden estar afectadas.

 

Síntomas que pueden llevar al fracaso escolar en adolescentes

Como acabamos de comentar, el fracaso escolar es una situación compleja en la que pueden influir muchas variables. Parte de nuestro trabajo en Adinfa consiste, precisamente, en identificar todas o la mayoría de estas variables, con la finalidad de acercarnos al origen del problema y proponer la solución adecuada.

En este sentido, es importante tener en cuenta que ciertos problemas de conducta se relacionan a menudo con una serie de síntomas que pueden llevar al fracaso escolar en adolescentes. Por lo tanto, conviene estar atentos a estos síntomas para ser capaces de actuar lo antes posible. Algunos de ellos son:

  • Problemas en los estudios. Suele ser el síntoma que más rápido identifican madres y padres, ya que es el más fácil de asociar al fracaso escolar. No obstante, esto no significa que el origen esté directamente aquí.
  • Dificultades en el aprendizaje. Aunque en muchas ocasiones se vincule a lo anterior, estas dificultades pueden tener causas muy diversas, que es importante conocer para encontrar la solución adecuada.
  • Trastornos de conducta. Pueden manifestarse en comportamientos diversos, que en ocasiones están estrechamente vinculados a la propia psicología del adolescente, y que si escalan terminan reflejándose en los estudios.
  • Discordancias familiares. El fracaso escolar suele ser mayor en adolescentes provenientes de familias en conflicto, desestructuradas o en situaciones problemáticas, lo que tiende a requerir ayuda exterior.
  • Propensión a la impulsividad y falta de autocontrol. Los adolescentes que tienen problemas para controlar emociones e impulsos a menudo acaban sufriendo fracaso escolar, ya que no son capaces de centrarse adecuadamente.
  • Incapacidad para cumplir horarios y normas establecidas. El establecimiento de límites no es una tarea sencilla, pero sí muy necesaria. Al contrario de lo que se suele pensar, aporta a nuestros hijos mayor seguridad.
  • Uso o abuso de sustancias tóxicas. Uno de los mayores miedos de madres y padres gira alrededor del consumo de alcohol y drogas, sobre todo cuando se convierte en adicción y repercute en la vida familiar del joven.
  • Relación con la policía o con la justicia. Llegar a este punto suele conllevar la aparición de otros síntomas previos, y sin lugar a dudas termina influyendo en los estudios, por lo que lo deseable es evitar a toda costa alcanzar este límite.
  • Uso de violencia o agresividad. Llegar a situaciones de violencia por parte del adolescente, ya sea en las cosas o en las personas (incluida la violencia de género o la filioparental), es superar un límite tras el que la ayuda externa será casi imprescindible.

 

Cómo prevenir el fracaso escolar en adolescentes

Como psicólogos especialistas en adolescentes, en Adinfa disponemos de diferentes programas enfocados en tratar el fracaso escolar y los síntomas asociados al mismo. Estos enfoques dependen de distintos factores, entre ellos las causas diagnosticadas del problema y el nivel de trastorno de conducta que puedan llegar a presentar los jóvenes.

De manera general, los adolescentes que nos llegan a Adinfa necesitando apoyo para evitar o superar una situación de fracaso escolar suelen presentar síntomas como los definidos en el apartado anterior. Esto es:

  • Han tenido problemas previos en los estudios.
  • Colaboran poco o muy poco en las tareas domésticas.
  • No respetan las normas y los horarios establecidos en el hogar.
  • Consumen e incluso abusan del alcohol o el cannabis.
  • Han tenido problemas con la policía o con la justicia de menores.
  • Se muestran violentos o agresivos en casa.

Llegados a este punto, la ayuda que prestamos desde Adinfa para prevenir el fracaso escolar en adolescentes se focaliza principalmente en tres tipos de intervención, dependiendo de la gravedad de la situación.

 

Tratamiento ambulatorio

En nuestro centro de día diagnosticamos y tratamos a jóvenes en conflicto leve o moderado, que presentan dos o más de los criterios mencionados anteriormente. Dependiendo de cada caso ponemos en marcha diferentes tratamientos y acciones, que pueden incluir seminarios y actividades de convivencia, reuniones y grupos de reflexión y/o autoayuda, etc.

 

Convivencia educativa

Para casos que necesitan un ambiente estructural mayor al de las consultas ambulatorias, disponemos de un grupo de convivencia terapéutica educativa que se desarrolla mediante un programa de atención especial, en el cual trabajamos coloquios individuales con el joven, reuniones con los padres o encuentros de familias, etc.

En este enlace puedes conocer mejor qué hacemos en estos grupos de convivencia, así como en nuestro centro de día.

 

Residencia con pernoctación

Para los trastornos de conducta entre moderado y grave (abuso de sustancias tóxicas, predisposición a la delincuencia, violencia e impulsividad…), que requieren una atención específica imposible de prestar a nivel ambulatorio, contamos con un programa de intervención en nuestra Clínica Adinfa. Estos casos implican inevitablemente separar al adolescente de su familia durante un tiempo, aportándole en nuestro centro las terapias educativas y psicológicas necesarias para que aprenda a ordenarse, conocerse, aceptarse y quererse.

Nuestro centro hospitalario es el primero de Andalucía que se encuentra dedicado en exclusividad a tratar estos trastornos de conducta y otros conflictos de la adolescencia. Puedes conocer más sobre la Clínica Adinfa aquí.

 

Cómo acceder a nuestro tratamiento psicológico para el fracaso escolar

Los programas y tratamientos psicológicos con jóvenes con fracaso escolar que desarrollamos en Adinfa muestran una tasa de éxito del 90 %. Gracias a que contamos con un equipo de profesionales con más de veinte años de experiencia, somos especialistas en la atención psicológica a jóvenes problemáticos que han conseguido, con nuestra ayuda y apoyo a ellos y sus familias, recuperar el ritmo en sus estudios.

Nueve de cada diez alumnos que han pasado por nuestras terapias y tratamientos han aprobado todas sus asignaturas. Y, lo más importante, han conseguido regresar a un modelo de vida sano y ordenado, y a una convivencia familiar satisfactoria y plena para ellos y sus seres queridos.

Los programas que ofrecemos en Adinfa pueden tener ayudas gracias a la colaboración del Instituto Nacional de la Seguridad Social. Esto implica que los jóvenes que cumplan los criterios exigidos por este organismo se benefician de una subvención de 60 % del coste del tratamiento, bonificable a través del seguro escolar. Los requisitos para obtener esta subvención son:

  1. Estar escolarizado durante el año en curso en 3º de la ESO, Formación Profesional Básica, ciclos formativos de grado medio o superior, bachillerato o universidad y haber abonado la tasa del seguro escolar.
  1. Haber estado matriculado el año anterior en un curso reglado (ESO, Formación Profesional…) y, si procede, haber abonado la tasa del seguro escolar.
  1. Que el trastorno presente se pueda diagnosticar según el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5), y que este trastorno esté afectando negativamente al rendimiento académico.

 

En Adinfa podemos aclararte cualquier duda sobre estos requisitos, así como aportarte toda la información complementaria que necesites sobre nuestros tratamientos para prevenir el fracaso escolar en adolescentes.

Contacta con nosotros rellenando el formulario que encontrarás en este enlace, o bien a través de los teléfonos o el email que encontrarás en esta página.

Recuerda: el fracaso escolar de tu hijo/a tiene solución. En Adinfa estamos para ayudarte.